Anoche aprovechando que Julián entraba en su casa con su vehículo utilitario, una banda integrada por 8 delincuentes con armas largas tuvo en vilo a su familia y a buena parte de la calle Cerrito al 1900 donde vive Laura con su marido, dos comerciantes a los que redujeron dejándolo a Julián en otra habitación como si fuera un rehén, para así poder robar algo de dinero en efectivo, los celulares, un televisor, una computadora que tengo para trabajar y algunas cámaras fotográficas viejas de poco valor.
AL HIJO LO TUVIERON DE REHÉN EN LA MISMA CASA
Uno se quedó en el auto blanco en el que vinieron, otro de campana en la puerta de la casa y los otros 6, ninguno de los cuales superaba los 20 años amedrentó y forcejeó con la pareja que en ningún momento supo nada de Julián, solo como recuerda Laura su mamá: “vi cómo lo metían para adentro cuando escuché ruidos y me asomé por la ventana del primer piso y lo desperté a mi marido y después no supe más nada de él, porque ya los tuvimos encima a los delincuentes (encapuchados con barbijo y guantes), varios de los cuales parecían como idos y alguno tenía 2 armas con las que nos apuntaban y asustaban permanentemente”.
TODO DURÓ 10 MINUTOS PERO PARECIERON SIGLOS
“La conmoción para la familia duró aproximadamente unos 10 minutos” –nos sigue narrando Laura- “y cuando ya nos podemos reunir nuevamente con Julián de repente escuchamos muchos disparos y veo cuando nos asomamos que había un grupo de personas en la esquina de Cerrito y Matreros que estaban asistiendo a mi vecino Néstor que estaba tirado en el piso con un balazo en el brazo, otro en el estómago y un tercero en el tórax”.
HUBO UN INTENTO DE ENTRADERA 10 MINUTOS ANTES
“Unos 10 minutos antes hubo un intento de entradera –continúa Laura- a la vuelta de casa… o sea que parece que estaban buscando al voleo un lugar donde robar”.
Con acciones de las que no tenemos certeza porque Néstor Scaramelini (el policía retirado que se tiroteó con los malvivientes) está recién operado en el Hospital Posadas, éste se había parapetado atrás de un árbol en diagonal a la casa donde sucedió el violento hecho y allí se produjo un tiroteo recibiendo un disparo en el brazo, otro en el tórax y uno en el abdomen.
A continuación, otro vecino que también es policía y vive casi enfrente de la familia que fue asaltada por 8 malvivientes, se encargó de trasladar a Néstor al Hospital del Bicentenario.
Un rato después se apersonó el comisario Artaza, titular de la comisaría de San Alberto quien lo trasladó al Hospital Posadas donde fue operado y está estable.
“SE LO QUERÍAN LLEVAR A JULI”
Shockeada por esta situación y unas horas después cuando pudimos cruzarnos con Isabel, la esposa de Néstor no quiso acceder a una nota, aunque nos comentó, mientras lloraba: “cuando llegué y lo vi tirado en la calle me desesperé, pero todo se hizo muy rápido… hubo mucha gente que ayudó… Néstor es un tipo muy querido… incluso están haciendo cadenas de oración por él… ahí en el piso me miró a los ojos y me decía: Se lo querían llevar a Juli… SE LO QUERÍAN LLEVAR A JULIANCITO…” (en alusión al joven que fue abordado por los delincuentes, al que conoce de tantos años en el barrio).