“Debutar” en el Teatro La Cochera de González Catán es –para quienes cultivamos el teatro independiente en el conurbano- una experiencia única que se remonta a sus comienzos en 1993.
Ser recibidos por Ilda y Olga en “su casa” es para los teatreros casi una sesión gourmet: Todo está en su sitio: la sala impecable, los camerinos completísimos, el sonido y la iluminación tan profesional, pero con un toque tan angelical, tan como de “somos de la familia teatral y sos bienvenido” que no hay función que vaya a salir mal.
Y así sucedió: Debutamos con “LA PELUCA DE MECHA ORTIZ” de Luis Saez en “La Cochera Teatro” de González Catán el 21 de noviembre de 2021 con una capacidad de la sala reducida en su aforo aún por la pandemia.
Jorge Destéfano y Ernesto Sigaud dirigidos por Lucas Echeverría le pusieron el cuerpo y la experiencia a Saba y Leiva los personajes que utilizó el dramaturgo Luis Saez para contarnos una historia con momentos en los que el espectador se sentirá identificado y otros que no… a lo mejor porque Sáez acostumbra darles el espacio y la voz a seres con vidas tan comunes y repetidas que pasarían desapercibidos sin su pluma; tal vez en un rapto desesperado por sacarlos del ostracismo, idéntico tratamiento que emplea con algunas palabras que el fárrago de la vida moderna sumado a la tecnología han dejado en el olvido.
Difícil hacer una crítica a una obra hecha por amigos de la cual quien les habla es uno de ellos y además se encarga de la parte técnica de la misma. Solo agregaré que se acometió la tarea de llevarla al Teatro en plena pandemia del 2020 cuando nadie sabía cómo seguía esta historia y la hicimos con el entusiasmo, la técnica, el amor y la dedicación, como si cada ensayo fuera el último, como si tal vez todo nuestro esfuerzo fuera en vano.
Pero también como depositando toda nuestra esperanza en cada encuentro guardando todos los protocolos, apretando los nudillos cada minuto con la impotencia de no poder abrazarnos, de “no hacer contacto” de “poner el cuerpo pero hasta ahí”.
La función fue nuestro reencuentro con el TEATRO y fue excepcional. Antes de salir a escena Jorge y Ernesto miraron por una hendija del telón de La Cochera Teatro y vieron unas decenas de espectadores, desafiando las previsiones de que “con calor y un domingo de feriado largo nadie va al teatro” estaban esperando que ellos salieran y pusieran todo arriba del escenario.
Y hubo aplausos, muchos, y hermosas devoluciones del público y fue así como los que integramos “FACE TEATRO” nos reencontramos con nuestro público en un teatro y le hicimos “pito catalán” a la pandemia… y a la muerte misma.